Sexo con cuerdas

Cada vez existen menos tabús relacionados con el sexo. Hoy en día, el sexo duro es una alternativa que goza de un gran protagonismo y se espera que las técnicas de dominación y sumisión sigan sumando nuevos adeptos en un futuro cercano. Entre las múltiples posibilidades que te ofrece este sector hay que mencionar el sexo con cuerdas como una de las opciones más morbosas y excitantes.

Como su propio nombre indica, nos referimos a una modalidad de relación sexual en la cual se utilizan cuerdas. Por norma general, el uso de este elemento tiene como principal objetivo someter a la chica (aunque también puede ser al revés), es decir, ella estará atada y tendrá limitada la movilidad, una situación muy excitante que permite todo tipo de opciones. Eso sí, de igual forma que sucede con todas las prácticas de dominación, es imprescindible establecer un vocabulario específico para evitar cualquier situación incómoda o accidente.

¿Por qué es excitante el sexo con cuerdas?

El auge del sado y del bondage no es fruto de la casualidad, pues responde a una serie de factores que hacen posible que cada vez esté más instaurado en la sociedad actual. El sexo es salvaje y una de las reglas no escritas es que, valga la redundancia, no existen reglas. Todo vale si el objetivo es sentir placer y las técnicas de dominación/sumisión son una alternativa perfecta para alcanzar grandes dosis de placer. Asimismo, es necesario recalcar que este tipo de prácticas ya no están consideradas como extremas, puesto que todo tipo de parejas se atreven a experimentar, especialmente si tienes en cuenta que podrás escoger el nivel que deseas (hay opciones idóneas para principiantes).

En cuanto a las cuerdas tienes que saber que te brindan todo tipo de opciones en una relación sexual. Sin duda, atar a una mujer con cuerdas, tanto las manos como las piernas, es una interesante posibilidad que no puedes dejar escapar. Además, puedes usar las cuerdas para realizar diferentes posturas acrobáticas, especialmente indicadas para aquellos que tienen un buen grado de elasticidad.

sexo con uso de cuerdas

Consejos para iniciarte en el sexo con cuerdas

La comunicación en pareja es esencial para esta práctica sexual, de forma que es imprescindible establecer límites antes de empezar esta práctica sexual. Ten en cuenta que no todas las personas están dispuestas a ser amarradas, así que tendrás que llegar a un acuerdo con tu pareja para llegar a un punto en común que sea excitante y morboso.

Hoy en día tienes en el mercado un sinfín de elementos que te ayudarán a atar a tu pareja, desde sencillas cuerdas de nylon hasta elementos como corbatas, esposas, cadenas. Para disfrutar de una experiencia más gratificante es recomendable encontrar el elemento ideal y que mejor encaje con las necesidades y con las fantasías de cada pareja. Por otra parte, es importante destacar que tienes diferentes formas de sumisión y que dependerán, en esencia, de la forma en la que ates a una persona. ¿Las conoces?

Nudos sencillos para el sexo con cuerdas

Empezaremos hablando del nudo en espiral como una de las alternativas más simples y efectivas para el sexo con cuerdas. Entre las múltiples ventajas que te ofrece el nudo en espiral destacaremos que es una solución perfecta para atar tanto brazos como piernas, así como es una alternativa muy sencilla de realizar y quitar. Por otro lado tenemos el nudo mariposa, otra opción simple y muy fácil de aprender. Esta variedad de nudo te ofrece muchas posibilidades en una sesión de sexo con cuerdas, con la particularidad de que no aprieta, así que es perfecto para aquellos que no deseen sentirse presionados durante la práctica.

No podemos finalizar este listado de nudos sencillos sin hablar del nudo esposa y es que, posiblemente, se trata de una de las variedades más comunes y utilizadas en el sexo con cuerdas. Tiene la función de sustituir a las esposas y te permitirá atar tanto las extremidades superiores como inferiores, ofreciéndote un gran poder de dominación que no te dejará indiferente.

sexo cuerdas

Formas de atar a una mujer en la cama

El clásico vainilla es la alternativa más popular a la hora de atar a una mujer en la cama. Para ello, tendrás que atar ambas muñecas en el cabecero de la cama, siendo importante que tenga una posición cómoda para poder disfrutar del sexo. El misionero amarrado es otra interesante y excitante propuesta que te permitirá disfrutar de la popular postura sexual desde un prisma más morboso y excitante. Lógicamente, la principal particularidad de esta postura es que podrás atar tanto piernas como manos. ¿Te atreves a ponerlo en práctica?

En definitiva, el sexo con cuerdas te abre una nueva ventana de posibilidades morbosas y que te permitirán disfrutar del sexo en otra dimensión. ¿A qué estás esperando para subir de nivel?

FUENTE: Shibari